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  • Diario Digital | viernes, 19 de abril de 2024
  • Actualizado 03:12

ACTIVIDADES TURÍSTICAS EN EL MUNICIPIO VITIVINÍCOLA DE JUMILLA

Una forma distinta de turismo a través del mundo del vino

El enoturismo, también conocido como turismo enológico consiste en viajar a un destino famoso por sus producciones vinícolas, para conocer desde dentro todo el mundo del vino, sus procesos de producción, historia, tradición y actividades de esta cultura. Estas actividades tienden a estar dirigidas por bodegas, Cooperativas del Vino y/o Denominaciones de Origen.

Una forma distinta de turismo a través del mundo del vino

Se define como una modalidad vinculada con el arte puesto que de forma estética ahonda en la atracción de público, empleando para ello recursos creativos de forma bella

Este tipo de actividad es una modalidad artística ya que emplea recursos creativos e interesantes para conseguir atraer al público amante del vino, un universo cultural de gran interés para turistas de todo el mundo.

Dentro de la Región de Murcia, Jumilla es uno de los municipios con mayor tradición vinatera. De hecho, dispone de múltiples actividades de carácter enoturístico. En este artículo repasaremos las principales ofertas de las bodegas jumillanas en lo que respecta al enoturismo. Para ello, visitaremos a las bodegas con mayor fama de Jumilla, Hacienda del Carche y Bodegas Juan Gil.

 Hacienda del Carche

En primer lugar, tras visitar Hacienda del Carche, hemos descubierto que esta bodega trabaja en paralelo con la bodega Casa de la Ermita, ambas dirigidas por el mismo propietario, Don Juan Vicente García Jordán.

Entre sus actividades principales para sus visitantes encontramos las siguientes: Visita al Parque Regional Protegido de la Sierra del Carche, un entorno único cercano a la propia bodega; visita a la parcela experimental de la bodega, dónde se encuentran más de una veintena de variedades de uva recopiladas de diversas partes del mundo; visita guiada al Centro de Interpretación del Vino de Bodegas Casa de la Ermita, donde se explican los principales procesos de cultivo de la vid y de elaboración del vino, así como muestras de la antigua maquinaria de la bodega, con la que se elaboraban originalmente los vinos.

También se da la opción de visitar la sala de crianza y degustación de vinos y tapas, poniendo así el colofón a esta experiencia en la que nos encontramos inmersos en el mundo del vino.

Además, dispone de numerosas actividades adicionales para completar la experiencia enoturística, e incluso pone a disposición de los usuarios una enotienda, dónde se pueden adquirir los productos propios de la bodega.

El enoturismo es una actividad que atrae miles de personas procedentes de todo el mundo, y tal y como nos indicó Miriam Soler Abarca, jefa del enoturismo de la bodega, la mayoría de extranjeros que visitan la bodega provienen del Reino Unido y de China. Para facilitar a estas nacionalidades sus visitas, tanto Hacienda del Carche como Bodega Casa de la Ermita, ponen a disposición de los clientes, una casa rural llamada La Casa del labrador, concebida para el descanso y el disfrute de la naturaleza, donde los usuarios se dejan embaucar por la cultura del vino. El emplazamiento de la bodega permite a los visitantes realizar paseos por los viñedos propios de ambas bodegas.

Por su parte, tras visitar la Bodega Juan Gil, uno de sus trabajadores llamado Miguel Gil nos comenta que esa bodega únicamente se limita a ofrecer visitas a la bodega y/o catas de los vinos de la misma (independientemente de si son tintos, blancos o rosados) y participar en otras actividades enoturísticas que organiza el Ayuntamiento de Jumilla, entre las que se incluyen principalmente las miniferias del vino, la Gran Cabalgata Tradicional del Vino, Ruta del Vino, Música entre vinos y Jornadas Gastronómicas.

A continuación, presentaremos una breve descripción de cada una de estas actividades y culturales que emplean las bodegas jumillanas  en el mundo del enoturismo para dar a conocer sus productos:

Las Miniferias del Vino, celebradas en el Jardín del Rey Don Pedro en Jumilla, consisten en copar dicho parque con stands de las distintas bodegas adscritas a la Ruta del Vino. Allí, los visitantes pueden disfrutar catando y comparando los productos de las distintas bodegas de forma gratuíta.

La Gran Cabalgata Tradicional del Vino supongo que será conocida por la mayoría gracias a las noticias, pero pese a ello no dejaremos pasar la oportunidad de presentarla como una cabalgata en la que las peñas de Jumilla recorren las calles del municipio al son de la música y lanzando miles de litros del vino de la ciudad.

Las Jornadas Gastronómicas, tal como su nombre indica consisten en fechas señaladas para degustar no sólo los vinos característicos de la tierra, sino también la gastronomía propia del lugar.

La Música entre Vinos es de las pocas actividades en las que las bodegas no participan de forma conjunta un mismo día, sino que cada fin de semana se celebra en una botella diferente un evento que consiste en una cena con los vinos propios de la bodega, fiesta y actuaciones musicales. Esta actividad se lleva realizando pocos años, pero ha crecido mucho en cuanto a público.

Y finalmente, todas estas actividades se agrupan bajo un nombre, Ruta del Vino de Jumilla, algo imperdible para los amantes del vino, de las técnicas artísticas de promoción de productos y de la cultura e historia de Jumilla.